Guanábana: la fruta trópical que combate el cáncer

También se le llama catuche y guanaba, pero el nombre más extendido de esta fruta tropical es de guanábana. Es originaria de las américas, particularmente de la región antillana, pero se adapta a los climas tropicales por lo que se cultiva también en China, Australia, Polinesia y otros países. Su nombre deriva del taíno y se consume desde hace siglos. Su carne es pulposa, refrescante y muy dulce, se puede comer sola y elaborar postres con ella.

Alrededor de la fruta giran interesantes mitos. Se dice que puede ayudar a controlar la diabetes; sin embargo, su alto contenido de fructosa y agua hace dudar esta afirmación. Sin embargo, si puede influir en el estrés oxidativo, que es un padecimiento degenerativo cuando la glucosa no está controlada.

El ingrediente más interesante de la guanábana es la annonacina, un compuesto del tipo de las acetogeninas sólo presente en frutas de la familia de las Annonasceae, entre las que destaca la guanábana, pero que también se encuentra la chirimoya , el ylang-ylang o la pimienta de Guinea.

La guanábana contra el cáncer

Uno de los atributos más sorprendentes de la guanábana —y particularmente de su abundancia en annonacina— es su efecto anticancerígeno. Aunque los estudios se han limitado a aplicaciones in vitro y en animales (se asegura que la razón es que las farmacéuticas no desean invertir en la investigación del uso de una fruta para combatir el cáncer) los resultados han sido ampliamente positivos en el uso de guanábana, extracto de la fruta y extracto de las hojas para combatir células cancerígenas en pulmones, páncreas, conducto gástrico y próstata.

La guanábana y el estrés oxidativo

También se cree que la guanábana pueda ayudar a combatir el estrés oxidativo, bloqueando el llamado complejo I, que es parte del proceso de las células en apoptosis o necrosis. Las células que, por degeneración o por invasión de un organismo nocivo, empiezan un proceso autodestructivo, liberan altas concentraciones de compuestos oxidativos, que resultan peligrosos para el resto del cuerpo.

La annonacina de la guanábana podría reducir el impacto de estas sustancias y ayudar a mantener la salud de las células del cuerpo.

La guanábana y la degeneración cognitiva

Aunque no hay suficiente evidencia al respecto, existen estudios que sugieren que la guanábana podría producir un daño neuronal que conduzca a una rara degeneración cognitiva similar al Parkinson.

Si bien los estudios no han tenido mayor seguimiento y a la fruta se le sigue considerando inocua, en la década pasada tuvieron el impacto suficiente para aparecer en revistas médicas importantes, como Neuroscience (2003) y The Lancet (1999). Los estudios estaban basados en aparición de padecimientos en poblaciones de El Caribe y Las Antillas, donde el consumo de guanábana es, en muchos casos, cotidiano y abundante.

Por otra parte, los contenidos de vitaminas del complejo B de la guanábana son ampliamente reconocidos como necesarios para la buena salud mental.

Propiedades nutritivas de la guanábana

Por lo general, las frutas tienden a concentrar en proporciones similares su azúcar y su fibra. De esta forma, la fibra ayuda a impedir la absorción de los azúcares. El caso de la guanábana es particular, pues si bien es fibrosa, sus contenidos de azúcar la destacan como una fruta refrescante, acuosa y muy dulce.

Sin embargo, no por ello debemos temer su consumo ocasional, o perdernos sus beneficios.

La guanábana es rica en vitamina C y en complejo B. También contiene ácido fólico, fósforo, magnesio, hierro y potasio.

 Finalmente, se le atribuyen propiedades antiespasmódicas y sedativas, se recomienda en la medicina natural para el tratamiento de asma, hipertensión y desórdenes del hígado.

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